El Jefe
salió de la oficina y encontró a su secretaria en el paradero
del bus.
Estaba
lloviendo torrencialmente.
El
paró su carro y preguntó: - ¿Quiere que la lleve a algún
lugar?
Claro! respondió ella, entrando al auto.
Al llegar al edificio donde ella vivía, él paró el auto y ella lo invitó para subir al departamento:
- Señor fue muy gentil conmigo, desviando su camino.
Por favor, suba un ratito para tomar algo, un cafecito o un whisky.
- No gracias, tengo que ir a mi casa...
- Por favor señor suba solo un ratito, aunque sea.
Él subió, atendiendo el gentil pedido de su secretaria.
Mientras él tomaba un trago, ella fue a su cuarto y luego de un rato, volvió muy sexy y perfumada.
Después de algunas copas, ¿quién puede aguantar una situación así? Él cayó literalmente en brazos de ella.
Fueron a la cama y ocurrió lo que estaba previsto, y acabó durmiéndose.
Alrededor de la 4:00 a.m., se despertó súbitamente, miró su reloj y se sobresaltó.
Se vistió, mientras pensaba cómo solucionar esta situación, e inmediatamente dijo a su secretaria:
- ¿Me puede prestar un pedazo de tiza?
Ella le entregó el pedazo de tiza, él lo colocó detrás de la oreja y se fue para su casa.
Al llegar, encontró a su mujer, loca de rabia e inmediatamente comenzó a contarle que al salir de su
oficina, estaba lloviendo torrencialmente y ofreció a su secretaria llevarla a su casa. "Al llegar
allí, me invitó a subir para tomar un trago, ella fue al baño y volvió con un baby doll muy sexy y transparente.
Después de algunos tragos, acabamos yendo a la cama e hicimos el amor. Me quedé dormido y desperté recién ahora".
La mujer dio un grito histérico y dijo: ¡Mentiroso… sinvergüenza…! ¡Estabas en el bar, jugando billar con tus amigotes! ¡Ni siquiera sabes mentir!
¡Además, te olvidaste la tiza
en la oreja!
Claro! respondió ella, entrando al auto.
Al llegar al edificio donde ella vivía, él paró el auto y ella lo invitó para subir al departamento:
- Señor fue muy gentil conmigo, desviando su camino.
Por favor, suba un ratito para tomar algo, un cafecito o un whisky.
- No gracias, tengo que ir a mi casa...
- Por favor señor suba solo un ratito, aunque sea.
Él subió, atendiendo el gentil pedido de su secretaria.
Mientras él tomaba un trago, ella fue a su cuarto y luego de un rato, volvió muy sexy y perfumada.
Después de algunas copas, ¿quién puede aguantar una situación así? Él cayó literalmente en brazos de ella.
Fueron a la cama y ocurrió lo que estaba previsto, y acabó durmiéndose.
Alrededor de la 4:00 a.m., se despertó súbitamente, miró su reloj y se sobresaltó.
Se vistió, mientras pensaba cómo solucionar esta situación, e inmediatamente dijo a su secretaria:
- ¿Me puede prestar un pedazo de tiza?
Ella le entregó el pedazo de tiza, él lo colocó detrás de la oreja y se fue para su casa.
Al llegar, encontró a su mujer, loca de rabia e inmediatamente comenzó a contarle que al salir de su
oficina, estaba lloviendo torrencialmente y ofreció a su secretaria llevarla a su casa. "Al llegar
allí, me invitó a subir para tomar un trago, ella fue al baño y volvió con un baby doll muy sexy y transparente.
Después de algunos tragos, acabamos yendo a la cama e hicimos el amor. Me quedé dormido y desperté recién ahora".
La mujer dio un grito histérico y dijo: ¡Mentiroso… sinvergüenza…! ¡Estabas en el bar, jugando billar con tus amigotes! ¡Ni siquiera sabes mentir!
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