Con una voz seductora la mujer le pregunta a su marido:
"¿Viste alguna vez
un billete de veinte dólares todo arrugado?"
"No", dice el marido.
Ella
le sonríe de manera sexy, se desabotona los 3 ó 4 botones de su blusa y
lentamente se mete la mano en el corpiño y saca un billete de veinte dólares,
bien arrugadito.
Él toma el arrugado billete y le sonríe complacidamente.
Entonces ella le pregunta, "¿Viste alguna vez un billete de cincuenta
dólares todo arrugado?"
"Uh... no, no lo vi nunca", él le dice, con un tono
ansioso en su voz…
Ella le da otra sonrisita muy sexy, se sube la pollera y
seductoramente busca en sus medias bien ajustadas... y saca un billete de
cincuenta también arrugado.
Él toma el billete arrugado de cincuenta dólares
y empieza a respirar más rápido por la anticipación.
"Ahora", dice ella,
"¿Alguna vez viste 50.000 dólares todos arrugados?"
Él dice:
"¡No!",
tratando de esconder su entusiasmo.
Ella le dice...
"Baja al garage..."
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